A continuación os dejo unos cuantos links que se hacen eco de la ponencia de clasura de la XVIII Jornada de Comunicación y Periodismo del Colegio Mayor Peñafiel por parte de José María García.Quiero reproducir en este blog la nota que ha elaborado la Agencia EFE sobre la conferencia de José María García poque ilustra perfectamente el contenido y la forma de la ponencia.
El periodista José María García repasó, en la ponencia de clausura de unas jornadas de Periodismo Deportivo celebradas en el Colegio Mayor Peñafiel de Valladolid, sus cuarenta años de trayectoria profesional, así como incidió en que las nuevas generaciones de periodistas "lo tienen jorobado".
"Pero como yo lo tenía cuando empecé. Luchando y trabajando dos horas más que el adversario se llega, pero os diría que es mejor comer de pie una lata de sardinas debajo de un puente que un plato de caviar de rodillas", reflexionó García.
En este sentido, indicó que le gustaría restar "un halo de pesimismo, pero la verdad es que existen dos problemas: que los políticos han perdido diez puntos y ahora son de tercera, ya que no tienen las agallas, sagacidad e independencia de los de antes, y, paralelamente, el descenso de la clase política ha incidido en el de la periodística, cuyo mayor ejemplo es la tele basura".
Y es que José María García detesta que "ejerzan de periodistas personas cuyo único mérito haya sido estar liado con una famosa", dijo.
"Durante muchos años una noticia no era noticia hasta que se contrastaba, mientras que ahora la máxima es no dejar que la verdad estropee un buen titular, algo que me decepciona", subrayó.
Para él, el periodismo es la profesión "más bonita, difícil, y la que más disgustos da, pero también la que más satisfacciones si se tienen dos 'pelotas' o dos ovarios", añadió.
Además, recalcó que el periodista debe "asumir riesgos y tener seguridad en si mismo", al mismo tiempo que comentó que no se puede olvidar de ser "libre e independiente".
"El dinero nunca puede quitarte tu independencia. El sí está al alcance de cualquier estúpido, lo difícil es decir no, y sólo puede decir no el privilegiado, no el hijo de papá", explicó en una de sus varias reflexiones que entrelazó con experiencias personales en el diario Pueblo, la Cadena Ser, Antena 3 Radio, la Cadena Cope y el grupo Telefónica antes de superar un cáncer.
Asimismo, reiteró que "un periodista jamás puede ser ni un empresario, ni un político, dado que al poder hay que fustigarle o aplaudirle, nunca estar con él".
También apuntó que un periodista tiene que ser "inteligente y no confundir libertad con libertinaje. Tiene que admitir los intereses supremos de su empresa, pero no puede aceptar los caprichos de los empresarios".
José María García manifestó que "no" es una "leyenda viva, sino un ejemplo para los jóvenes periodistas como vosotros, que os enfrentáis a una lucha titánica y tenéis un futuro complicado".
"Los jóvenes podéis aportar agilidad, pero periodistas como yo contamos con el conocimiento y la sabiduría que da la experiencia", agregó."Lo que me ha separado a mí del resto, a pesar de haber profesionales mucho más cultos y preparados, ha sido el riesgo, la independencia y la laboriosidad. He batido récords de audiencia y ningún periodista en Europa ha ganado dos mil millones de pesetas y lo cuento no como presunción, sino como dato", sentenció.
"Pero como yo lo tenía cuando empecé. Luchando y trabajando dos horas más que el adversario se llega, pero os diría que es mejor comer de pie una lata de sardinas debajo de un puente que un plato de caviar de rodillas", reflexionó García.
En este sentido, indicó que le gustaría restar "un halo de pesimismo, pero la verdad es que existen dos problemas: que los políticos han perdido diez puntos y ahora son de tercera, ya que no tienen las agallas, sagacidad e independencia de los de antes, y, paralelamente, el descenso de la clase política ha incidido en el de la periodística, cuyo mayor ejemplo es la tele basura".
Y es que José María García detesta que "ejerzan de periodistas personas cuyo único mérito haya sido estar liado con una famosa", dijo.
"Durante muchos años una noticia no era noticia hasta que se contrastaba, mientras que ahora la máxima es no dejar que la verdad estropee un buen titular, algo que me decepciona", subrayó.
Para él, el periodismo es la profesión "más bonita, difícil, y la que más disgustos da, pero también la que más satisfacciones si se tienen dos 'pelotas' o dos ovarios", añadió.
Además, recalcó que el periodista debe "asumir riesgos y tener seguridad en si mismo", al mismo tiempo que comentó que no se puede olvidar de ser "libre e independiente".
"El dinero nunca puede quitarte tu independencia. El sí está al alcance de cualquier estúpido, lo difícil es decir no, y sólo puede decir no el privilegiado, no el hijo de papá", explicó en una de sus varias reflexiones que entrelazó con experiencias personales en el diario Pueblo, la Cadena Ser, Antena 3 Radio, la Cadena Cope y el grupo Telefónica antes de superar un cáncer.
Asimismo, reiteró que "un periodista jamás puede ser ni un empresario, ni un político, dado que al poder hay que fustigarle o aplaudirle, nunca estar con él".
También apuntó que un periodista tiene que ser "inteligente y no confundir libertad con libertinaje. Tiene que admitir los intereses supremos de su empresa, pero no puede aceptar los caprichos de los empresarios".
José María García manifestó que "no" es una "leyenda viva, sino un ejemplo para los jóvenes periodistas como vosotros, que os enfrentáis a una lucha titánica y tenéis un futuro complicado".
"Los jóvenes podéis aportar agilidad, pero periodistas como yo contamos con el conocimiento y la sabiduría que da la experiencia", agregó."Lo que me ha separado a mí del resto, a pesar de haber profesionales mucho más cultos y preparados, ha sido el riesgo, la independencia y la laboriosidad. He batido récords de audiencia y ningún periodista en Europa ha ganado dos mil millones de pesetas y lo cuento no como presunción, sino como dato", sentenció.
1 comentario:
Enhorabueno por la Jornada que habéis organizado y por la calidad de los ponentes. Saludos,
Elena
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