El
Colegio Mayor Peñafiel quiso celebrar por todo lo alto a su Patrón y para, la Semana Grande, pudimos contar con la presencia de Leo Harlem, que estuvo con nosotros
cenando y de tertulia. No fue un escenario en el sentido estricto:
fue la sala de estar del Colegio. Tampoco era una actuación, sino
una tertulia informal.
Fue sentarse Leo, comenzar las preguntas y
desatarse una carcajada que no cesó hasta el final de la tertulia,
en la que tanto residentes como colegiales acabaron exhaustos de
tanto reír.
Sin artificio, sin complicaciones: Leo tan solo cuenta
lo que cualquiera de nosotros ve igual que él. Pero tiene un don
para convertirlo en algo desternillante hasta la lágrima. Copio a continuación alguna de sus gloriosas frase:
"Para cocina creativa, la de mi
madre, que con el sueldo de mi padre comíamos cinco"
"...y le ponen un nombre así como
tembladera de huevo y azúcar en su espejo de caramelo. Mire
usted, eso de toda la vida se ha llamado flan"
"las ovejas clonadas son todas
iguales, aunque no sean clonadas"